1 – Datos abrumadores
2 – Evolución de la población extranjera en España
3 – John Felipe Romero Meneses – La historia de una realidad actual – inmigración, desempleo y crisis económica.
Datos Abrumadores
En un recuento de bajas militares del ejército español en Afganistán ó Líbano, se aprecia que el 57% de los fallecidos se encontraban en edades comprendidas entre los 18 y 21 años. Cuándo este tramo sólo representa el 10.5% de la tropa.
El 42.9% de los militares muertos en Afganistán y Líbano eran extranjeros, cuando el porcentaje de los mismos representa el 6.7% de la tropa.
Evolución de la población extranjera en España
Localidades con mayor número de extranjeros (todas corresponden a la provincia de Alicante, provincia con mayor proporción de inmigrantes del país):
San Fulgencio (77,58% de sus 12.030 habitantes no son españoles)
Rojales (65,25% de extranjeros),
Teulada (60,37%),
Calpe (58,61%),
Jávea (51,22%) y
Alfaz del Pi (50,89%)
John Felipe Romero Meneses
John Felipe Romero Meneses - Un poco de Ejército, Inmigración, muertes y crisis económica.
Esta es una pequeña historia dentro de un contexto de crisis económica, desempleo del 20% y un cambio poblacional donde la población inmigrante representa un 12% de la población total.
Es la historia de John Felipe Romero Meneses, un colombiano que se alistó al ejército español porque necesitaba un empleo.
Como muchos soldados en el ejército español, y una más de sus bajas, Romero Meneses era un inmigrante colombiano que se unió al ejército después del 2002 cuando España abrió sus fuerzas armadas a ciudadanos no españoles.
En un país donde los recuerdos de la Guerra Civil de 1936 y los 40 años de dictadura de Franco todavía están frescos, la historia de Romero Meneses plantea preguntas sobre el patriotismo y la ciudadanía. Pero el soldado no fue solo una baja en esta guerra. Él también fue víctima de la crisis económica.
Los padres de Romero Meneses consideran que los soldados inmigrantes deberían tener garantizada la ciudadanía española una vez que se unan al ejército, porque muchos arriesgan sus vidas por su país de adopción.
“Para la ejército, era Español” dice la madre de John, en su apartamento de clase obrera en un suburbio de Barcelona. “Pero para todo lo demás, era Colombiano.”
España comenzó a aceptar inmigrantes en el ejército en 2002 porque no podía reclutar suficientes españoles para completar sus listas, tras eliminar la obligatoriedad del servicio militar. Ahora hay 5800 soldados inmigrantes en las fuerzas armadas españolas, correspondientes a un 7% de las tropas totales españolas, 88500.
Los inmigrantes pueden servir hasta 6 años a no ser que obtengan la ciudadanía a través de canales normales, los cuales son normalmente lentos. El tiempo límite imposibilita que promocionen de rango, según el director de una asociación militar que defiende los derechos de los soldados.
Algunos críticos han acusado al Ejército Español por posicionar inmigrantes de manera desproporcionada en las líneas de fuego, mientras otros critican su patriotismo.
La ministra de defensa española, reconoce que no ayuda al proceso de la expedición de la ciudadanía española, pero dice que se provee la misma compensación a las familias para todos los soldados que murieron en la línea de batalla, independientemente de su nacionalidad.
El Presidente del Gobierno, José Luis Rodriguez Zapatero, retiró las tropas de Iraq para cumplir con la promesa de campaña al poco de salir elegido tras las elecciones del 2004, pero continuó con el apoyo a la guerra de Afganistán.
Romero Meneses es un ejemplo claro la transformación radical en los pasados 15 años de un país que escapó de la pobreza y represión a un país que ha recibido a millones de inmigrantes, que componen ahora cerca del 10% de una población que llega a los 46 millones.
Pero, Romero Meneses ha sido también llevado al ejército dada la crisis económica que ha golpeado duramente y en especial a España, donde el desempleo es ahora del 20 por ciento.
Aunque tenía el derecho legal a residir en España, decidió unirse al ejército a los 18 años, porque garantizaría sus permisos de trabajo. Sin ellos, él haría frente a un futuro de contratos inciertos pagados bajo mesa.
“Si hubiera tenido otra opción, no hubiera ido al ejército”, dice la madre de John.
Fuentes:
2 – Evolución de la población extranjera en España
3 – John Felipe Romero Meneses – La historia de una realidad actual – inmigración, desempleo y crisis económica.
Datos Abrumadores
En un recuento de bajas militares del ejército español en Afganistán ó Líbano, se aprecia que el 57% de los fallecidos se encontraban en edades comprendidas entre los 18 y 21 años. Cuándo este tramo sólo representa el 10.5% de la tropa.
El 42.9% de los militares muertos en Afganistán y Líbano eran extranjeros, cuando el porcentaje de los mismos representa el 6.7% de la tropa.
Evolución de la población extranjera en España
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Localidades con mayor número de extranjeros (todas corresponden a la provincia de Alicante, provincia con mayor proporción de inmigrantes del país):
San Fulgencio (77,58% de sus 12.030 habitantes no son españoles)
Rojales (65,25% de extranjeros),
Teulada (60,37%),
Calpe (58,61%),
Jávea (51,22%) y
Alfaz del Pi (50,89%)
John Felipe Romero Meneses
John Felipe Romero Meneses - Un poco de Ejército, Inmigración, muertes y crisis económica.
Esta es una pequeña historia dentro de un contexto de crisis económica, desempleo del 20% y un cambio poblacional donde la población inmigrante representa un 12% de la población total.
Es la historia de John Felipe Romero Meneses, un colombiano que se alistó al ejército español porque necesitaba un empleo.
Como muchos soldados en el ejército español, y una más de sus bajas, Romero Meneses era un inmigrante colombiano que se unió al ejército después del 2002 cuando España abrió sus fuerzas armadas a ciudadanos no españoles.
En un país donde los recuerdos de la Guerra Civil de 1936 y los 40 años de dictadura de Franco todavía están frescos, la historia de Romero Meneses plantea preguntas sobre el patriotismo y la ciudadanía. Pero el soldado no fue solo una baja en esta guerra. Él también fue víctima de la crisis económica.
Junto a sus padres abandonó un país turbulento en búsqueda de una mejor vida en España y acabó uniéndose al ejército porque no pudo encontrar un trabajo.
Los padres de Romero Meneses consideran que los soldados inmigrantes deberían tener garantizada la ciudadanía española una vez que se unan al ejército, porque muchos arriesgan sus vidas por su país de adopción.
“Para la ejército, era Español” dice la madre de John, en su apartamento de clase obrera en un suburbio de Barcelona. “Pero para todo lo demás, era Colombiano.”
España comenzó a aceptar inmigrantes en el ejército en 2002 porque no podía reclutar suficientes españoles para completar sus listas, tras eliminar la obligatoriedad del servicio militar. Ahora hay 5800 soldados inmigrantes en las fuerzas armadas españolas, correspondientes a un 7% de las tropas totales españolas, 88500.Los inmigrantes pueden servir hasta 6 años a no ser que obtengan la ciudadanía a través de canales normales, los cuales son normalmente lentos. El tiempo límite imposibilita que promocionen de rango, según el director de una asociación militar que defiende los derechos de los soldados.
Algunos críticos han acusado al Ejército Español por posicionar inmigrantes de manera desproporcionada en las líneas de fuego, mientras otros critican su patriotismo.
La ministra de defensa española, reconoce que no ayuda al proceso de la expedición de la ciudadanía española, pero dice que se provee la misma compensación a las familias para todos los soldados que murieron en la línea de batalla, independientemente de su nacionalidad.
El Presidente del Gobierno, José Luis Rodriguez Zapatero, retiró las tropas de Iraq para cumplir con la promesa de campaña al poco de salir elegido tras las elecciones del 2004, pero continuó con el apoyo a la guerra de Afganistán.
Romero Meneses es un ejemplo claro la transformación radical en los pasados 15 años de un país que escapó de la pobreza y represión a un país que ha recibido a millones de inmigrantes, que componen ahora cerca del 10% de una población que llega a los 46 millones.
Pero, Romero Meneses ha sido también llevado al ejército dada la crisis económica que ha golpeado duramente y en especial a España, donde el desempleo es ahora del 20 por ciento.
Aunque tenía el derecho legal a residir en España, decidió unirse al ejército a los 18 años, porque garantizaría sus permisos de trabajo. Sin ellos, él haría frente a un futuro de contratos inciertos pagados bajo mesa.
“Si hubiera tenido otra opción, no hubiera ido al ejército”, dice la madre de John.
“Estaba muy frustrado en casa, y un día simplemente dijo, ‘Me voy a alistar’, y se alistó incluso antes de haber conocido la ciudad de Barcelona.”
Fuentes:
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